Después de seis meses donde el agua fue la gran protagonista de nuestras costas, dejando secuelas muy importantes en las instalaciones del club, nos pusimos a trabajar para dejar el club en las mejores condiciones de cara a una nueva temporada estival. Para ello se viene trabajando arduamente en reparaciones varias, pintura, limpieza en general de cada rincón donde el agua dejó desperdicios. Entre los daños indirectos se observó que los alambrados perimetrales y los caminos internos de los predios se dañaron, además se depositó una gran cantidad de resaca y palos traídos por el agua.
Pero en lo que se refiere a la inmensa arboleda que contaba Pescadores, la naturaleza hizo un desastre, cientos de plantas cayeron o se secaron, dejando buena parte del camping sin ellas. El exceso de agua en el suelo produce disminución del oxígeno dentro de unas pocas horas. Esta situación induce una variedad de disturbios fisiológicos que alteran el crecimiento de la planta, incluyendo reducción de la absorción de agua, desbalances hormonales, alteración varias.
Por suerte seguimos contando con una buena “sombra”, pero pensando en el futuro rápidamente nos ponemos en marcha en reponer esos árboles caídos. Este miércoles ya comenzamos a plantar, serán cientos para que en un futuro no muy lejano contemos con renovadas plantas en cada sector de nuestro hermoso club.