27/05/2020
Jugar al tenis pero solo en modo singles, y al final del partido, en vez del clásico apretón de manos, un choque de raquetas. Andariveles vacíos de por medio entre los nadadores en cada pileta de natación. Clases de danza y gimnasia al aire libre con dos metros de distancia entre las personas y, en todos los casos, con un sistema para reservar turnos.
La crisis que generó el nuevo coronavirus irrumpió en la cotidianidad de las personas con un sinfín de restricciones y cambios en casi todos los ámbitos de la vida. La forma de hacer deporte también se modificó. Por ahora solo es posible hacer ejercicio dentro de las casas, pero algunos clubes, federaciones y asociaciones deportivas ya han diseñado protocolos y se encuentran pensando alternativas para retomar la práctica de algunas disciplinas, siempre y cuando esto sea autorizado previamente por el Ministerio de Salud. Reglas que cambiarán, al menos durante un tiempo, la forma de practicar deportes y hacer actividad física en todos los niveles, desde lo amateur hasta lo profesional.
Hay deportes que por su naturaleza son más fáciles de retomar que otros, por ejemplo, el tenis. La Asociación Argentina de Tenis (AAT) difundió un protocolo en el que detalla las características que convierten a este deporte en uno que no supone un alto riesgo de contagio. Entre ellas, que no hay contacto entre las personas que lo practican. En el escrito recomiendan jugar solo al aire libre y modificar el clásico apretón de manos al final del partido por un «choque de raquetas».
«¿Pero qué pasa cuando el jugador de tenis sopla la pelota y después el otro la agarra?», se pregunta Mario Storni, director del departamento de Educación Física del Club Atlético Independiente . «Hay mucha incertidumbre, aún no se sabe bien cuánto dura el virus en las distintas superficies. En Italia han catalogado a los deportes según el riesgo que representan, del cero al cuatro. El fútbol es tres. El rugby es aún más riesgoso, sería puntuado con un cuatro, y el tenis es de los menos peligrosos, pero no hay certezas».
Para los que practicaban un deporte a modo relacional, según Mariano Mailhe, coordinador general deportivo del club Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires (GEBA) , la vuelta a las prácticas va a ser compleja. Explica que sería difícil adaptar las disciplinas a las nuevas exigencias y que, a su vez, todos los socios puedan participar. Para cumplir con el distanciamiento deberían ofrecer clases con menos participantes. Entonces para satisfacer la demanda de los asociados tendrían que añadir más clases e incurrir en mayores gastos. Esto va a contramano de las posibilidades económicas del club, que, al igual que todos los otros, fue muy golpeado por la pandemia.
«Me pongo a pensar en el gimnasio del club y deberíamos poner gente que esté limpiando todo el tiempo y otros que regulen el ingreso de la gente. Tal vez se pueda hacer natación o algunas clases al aire libre, pero deberíamos poner un sistema de turnos. Todo implica una logística bastante complicada», dice Mailhe.
Storni, junto con profesionales de otros clubes, como Racing Club y Boca Juniors , entre otros, hace tiempo armaron un grupo de WhatsApp para poder coordinar acciones en conjunto y ayudarse mutuamente. Ahora ese espacio virtual es clave para pensar nuevos modos de entrenar.
«El director deportivo de Vélez Sarsfield nos dijo que están haciendo un protocolo de regreso para algunos deportes en equipo donde se trabaje de a tres jugadores. Es decir, entrenamientos de la parte técnica sin que se enfrenten dos equipos. Esos jugadores deberían entrenar siempre juntos, de ese modo, si hay un contagio el entrenador ya sabe con quiénes estuvo», explica Storni. Otras de las posibilidades sería que entrenen por puestos. Por ejemplo, los defensores en un turno, atacantes en otro.
Ellos empezaron a trabajar en protocolos y se los presentaron al Gobierno. La idea es tener lineamientos y que luego cada club los incorpore según la infraestructura y posibilidades de cada uno. «Las autoridades por el momento están concentradas en la cuestión económica y sanitaria. Pero el deporte y la salud son dos vectores que se entrecruzan. Al momento de la vuelta a las actividades recreativas, estas van a ser muy importantes para la salud física y psíquica», indicó Storni. Aunque resalta que estos protocolos, en caso de ser utilizados, cree que se implementarán para los equipos federados y no para el grueso de los socios.
Desde el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación señalaron que están pensando propuestas junto a los clubes y federaciones deportivas para cuando la autoridad sanitaria autorice el regreso de estas actividades. Pero indicaron que hay reuniones pendientes y que todo depende de la dinámica de la pandemia. No es posible poner plazos.
«En los deportes grupales se rompe el distanciamiento en el campo de juego, en las charlas técnicas, en los vestuarios y en los micros. Habría que incorporar varias modificaciones. En cuanto al tenis, creo que sería uno de los primeros deportes que se podrían retomar ya que la posibilidad de contagio es mínima. Si un jugador sopla la pelota, el virus de todos modos iría cayendo. La natación también es de los menos riesgosos si se dejan andariveles vacíos y se implementa un sistemas de turnos. En cuanto a los gimnasios, suelen ser más complicados porque muchos son espacios chicos y con muchos aparatos y elementos», explica Eduardo López, infectólogo y asesor presidencial durante esta pandemia.
«En nuestro caso hemos ofrecido las instalaciones como posible hospital de campaña, por eso también estamos expectantes para saber si las van a necesitar o no. Nosotros antes de la cuarentena ya habíamos implementado un protocolo y, por ejemplo, en el vóley solo podía haber tres jugadores de cada lado», dice Oscar Vazquez, presidente del Club Ciudad de Buenos Aires.
Nicolás Wender es coordinador de deportes del Tortuguitas Point, en Garín . Ellos ofrecen natación para chicos y tenis, entre otras actividades. Ahora el club está totalmente cerrado y esperan los lineamientos del Estado.
Algo parecido le sucede al club Banco Nación . Su presidente, Rodrigo Graña, explica que por el momento el objetivo es atravesar la profunda crisis económica y que por eso muchos profesores ofrecen clases virtuales. «Lo económico es lo que más nos preocupa. Estamos tratando de hacer acuerdos con empresas para dar clases por Zoom. Por eso aún no estamos realizando protocolos para cando la gente regrese. Creo que los clubes van a ser relegados para las últimas etapas de la cuarentena».
En tiempos de distanciamiento, el rugby es el que la tiene más difícil. Santiago Marotta, presidente de la Unión de Rugby de Buenos Aires (URBA) , señaló que han pensado modificaciones, pero que primero se las comunicarán a los clubes. «También nos hemos juntado con otras federaciones. El objetivo es hacer un protocolo que sea como una columna vertebral que nos sirva a todos. La idea es que, cuando el Gobierno lo disponga, nosotros ya tengamos unos lineamientos que le den confianza a la gente para volver a los clubes».